Investigadores de Hospital Clínico, del Idibaps, de la Universidad de Barcelona (UB) y del Centro de Investigación Biomédica en Red de Salud Mental (Cibersam) del Instituto de Salud Carlos III han identificado la zona del genoma implicada en la respuesta al litio en el trastorno bipolar.
La investigación, que publica la revista ‘The Lancet’, es el mayor análisis genético mediante GWAS (Genome-Wide Association Study) realizado hasta la fecha sobre la respuesta a esta medicación, en el que han incluido datos de más de 2.500 pacientes con la enfermedad.
Los doctores Antonio Benabarre, Francesc Colom, Esther Jiménez y Eduard Vieta, de la Unidad y el grupo de investigación en Trastornos Bipolares del Clínico y del Idibaps, junto con las doctoras Bárbara Arias y María Medios, de la Unidad de Antropología de la Facultad de Biología de la UB, han participado en este estudio, enmarcado en el consorcio internacional ConLiGen.
El litio es el tratamiento de primera línea para el trastorno bipolar (TB), una enfermedad crónica que se presenta en forma de episodios y caracterizada por fluctuaciones en el estado de ánimo.
Poco se sabe sobre su mecanismo de acción y estudios previos sugieren que la respuesta de los pacientes al litio puede ser una base genética, aunque los resultados no son reproducibles ni concluyentes.
Los investigadores han evaluado los datos clínicos y genéticos de más de 2.500 pacientes con TB para determinar qué zonas del genoma están implicadas en la respuesta al tratamiento con litio.
Los resultados demuestran la asociación entre variantes genéticas localizadas en el cromosoma 21 y la respuesta a esta medicación.
La región genética asociada incluye dos regiones largas de Ácido Ribonucleico (ARN) no codificante.
Para validar si estas regiones detectadas están relacionadas con la respuesta al tratamiento, los investigadores del consorcio realizaron un estudio con 73 pacientes tratados con litio en monoterapia durante 2 años y confirmaron que los marcadores genéticos encontrados ayudan a predecir las recaídas de los pacientes con TB cuando son tratados con litio.
El doctor Vieta ha explicado que “la relevancia de estos resultados es doble porque facilitan identificar pacientes que pueden responder de forma favorable al litio, en un paso más hasta la medicina personalizada aplicada a la salud mental, y además sugieren la existencia de un nuevo mecanismo de acción al litio que podría sentar las bases para futuros tratamientos más eficaces y seguros”.
FUENTE: www.heraldo.es